Al encabezar la instalación y primera sesión ordinaria de la ‘Mesa interinstitucional sobre refugio y protección complementaria’, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas Rodríguez, resaltó que el propósito es generar los instrumentos necesarios para enfrentar la emergencia sanitaria por el coronavirus (COVID-19), y dar cumplimiento a los compromisos a nivel internacional que México ha suscrito en el Marco Integral Regional para la Protección y Soluciones (MIRPS), así como en el Pacto Mundial sobre los Refugiados.
Como presidente de la mesa, explicó que en dichos instrumentos se establecen como principios fundamentales de la política de refugio del país, la no criminalización por el ingreso indocumentado, la no discriminación y el respeto al Interés Superior de la Niñez y la unidad familiar.
Durante la sesión, el secretario técnico de dicha mesa y coordinador general de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), Andrés Ramírez Silva, presentó las acciones que se han llevado en materia de protección internacional en México en tiempos de COVID-19.
En este sentido, enfatizó que el fenómeno migratorio ha tenido un crecimiento exponencial en los últimos años y que en 2013, la Comar registró mil 296 personas solicitantes del reconocimiento de la condición de refugiado, cifra que aumentó en 2019 a 70 mil 600.
Informó que, en el primer trimestre de 2020, hubo un incremento del 34 por ciento en el número de solicitudes de la condición de refugiados respecto al mismo periodo en el año anterior.
Andrés Ramírez Silva expuso que la pandemia por el coronavirus propició una caída del 27 por ciento en el periodo de enero a mayo de este año, en comparación con el mismo periodo del año anterior, debido al cierre de fronteras en los países del triángulo norte centroamericano.
En la sesión virtual el representante en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Mark Manly, presentó el proyecto ‘Revalidación de estudios y emisión de cédula profesional de solicitantes de la condición de refugiado y refugiados profesionales de la salud’ para su incorporación a la respuesta en México por COVID-19, lo que representa un aporte para la población en necesidad de protección internacional al combate de la pandemia en México.
Asimismo, se aprobó establecer el cronograma de trabajo con las dependencias participantes y hacer una amplia difusión del proyecto.
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