La historia del cartonero Pedro Linares, su sueño con los alebrijes y su encuentro con el diablo en un viaje al inframundo, fue representada este sábado por la reconocida compañía teatral “La Trouppe”, en el patio central de la sede alterna del Senado de la República.
Con la obra “Cuando canta un alebrije”, la antigua casona Xicoténcatl, número 9, abrió nuevamente sus puertas a la agenda cultural de la Ciudad de México, con un evento organizado por la Junta de Coordinación Política, que preside el senador Ricardo Monreal Ávila, a través del proyecto “Casa Nuestra”.
El promotor cultural y coordinador de dicho proyecto, Bernardo Noval, dio la bienvenida al público, que asistió con aforo limitado y con todas las medidas sanitarias indicadas por las autoridades.
Con la obra “Cuando canta un alebrije”, la antigua casona Xicoténcatl, número 9, abrió nuevamente sus puertas a la agenda cultural de la Ciudad de México, con un evento organizado por la Junta de Coordinación Política, que preside el senador Ricardo Monreal Ávila, a través del proyecto “Casa Nuestra”.
El promotor cultural y coordinador de dicho proyecto, Bernardo Noval, dio la bienvenida al público, que asistió con aforo limitado y con todas las medidas sanitarias indicadas por las autoridades.
La puesta en escena narra la pesadilla, derivada de una fiebre, del cartonero Pedro Linares -creador de los alebrijes- y su viaje al inframundo, donde descubre seres extraños de colores, con alas, plumas y cuernos, pero también se encuentra con el diablo y el infierno, y es sometido a un juicio.
El recinto de la antigua casona de Xicoténcatl, número 9, ha albergado de forma gratuita exposiciones de artes plásticas y fotografía, presentaciones de libros, representaciones teatrales, conciertos y conferencias, convirtiéndose así en un espacio para el arte y la cultura.
Discussion about this post