En cumplimiento al compromiso de la Secretaría de Gobernación de reforzar la presencia del Estado en aquellas comunidades que han sido azotadas por los altos índices de la violencia y delincuencia, la Subsecretaría de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos, arrancó en Monterrey, Nuevo León, un plan integral para la promoción de la cultura de paz y la reconstrucción del tejido social.
Se atenderán las colonias Fomerrey 35 y 24, así como Barrio de la Industria, Rubén Jaramillo, Progreso y 10 de Marzo. Abarcará centros de trabajo y comunitarios, además de escuelas y espacios públicos.
Dicha estrategia se despliega a través del trabajo de campo en territorio neolonés por parte de personas servidoras públicas de diferentes dependencias.
Asimismo, se cuenta con la colaboración de la iniciativa privada (Grupo Femsa), así como de los sectores académico (Universidad de Monterrey) y social (Telar A.C.).
También de vecinas y vecinos de las colonias mencionadas, quienes compartieron su visión sobre las condiciones del tejido social en la comunidad y sus necesidades en la materia.
Esta herramienta deriva de las Sesiones de Entendimiento para la Promoción de la Cultura de Paz y la Reconstrucción del Tejido Social, respecto a la cual la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, expresó su convencimiento por la importancia de atender de manera integral y conjunta los retos que representan las causas estructurales de la violencia y la fragmentación del tejido social.
Lo anterior, a fin de construir una sociedad más justa y generar un estado de bienestar más igualitario, pacífico, sano, próspero y seguro.
El subsecretario de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos, Rabindranath Salazar Solorio, celebró la voluntad y el compromiso del gobierno en sus tres órdenes, además del de las y los actores sociales para emprender la tarea de lograr una verdadera cultura de paz, duradera y sostenible, y construir un tejido social sólido.
La estrategia hasta ahora se ha implementado en los estados de Guerrero y Baja California.
Dicha subsecretaría da seguimiento puntual a las necesidades de las comunidades y a los avances que se registran, derivado de la intervención en las colonias con mayores índices delictivos.
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